¡Relájate! 3 consejos que te ayudarán

¿Sabes cómo detener tu vida?

¿Sientes que tanto tu mente como tu cuerpo necesitan parar?. ¿Vives estresada y no consigues cambiar ese estado? El agobio y la tensión se han convertido, sin saber cómo, en tus compañeros inseparables y no hay manera de deshacerte de ellos?

Es el momento de relajarte. Necesitas un momento guau.

¿Qué es un momento Guau?

Tienes que desconectar de tu día a día, de todo y de todos. Tu mente necesita tanto a nivel emocional, físico y químico parar y estructurarse. Y esto lo hace cuando estás relajada, y no piensas en nada. Cuando conectas contigo misma y alejas de tu vida todo el estrés es cuando comienzas a ser tu misma. Ese es un momento guau. Quiero que aprendas a crear y generar este tipo de momentos. Te voy a dar tres consejos para que tengas un momento para ti y empieces a conseguir relajarte.

Sofá, manta y peli. ¿Por qué normalmente te sientes mal cuando te apetece este plan? Te resulta inevitable pensar que estás perdiendo el tiempo si te quedas una tarde en casa viendo una película. Pero es importante que sepas que este tipo de planes más tranquilos son muy necesarios.
Tienes que echar el freno y parar tu vida. Relájate en el sofá viendo una buena película. Tu mente desconectará de todo. Sólo se centrará en lo que la película está transmitiendo. Por eso debes de prestar atención al tipo de película que quieres ver. Elige una que te haga sentir bien y cuyos valores refuercen los tuyos. No te pongas a ver un dramón si luego no quieres sentirte triste.
De esta manera no sólo tu mente está descansando, sino que también lo está haciendo tu cuerpo al estar tumbado en el sofá. Para conseguir mejores resultados, vigila que el lugar que elijas sea cómodo y haga que te encuentres bien.

Baño de espuma relajante. ¿Cuánto tiempo hace que no te das un baño relajante? Sí, date ese capricho. Prepárate un baño de agua caliente. Ponte velas, la música que más te gusta, desconecta todo tipo de aparatos electrónicos y detén el tiempo. No hay prisa. Es el momento de estar en contacto contigo misma a través del baño relajante. Intenta apagar los pensamientos que continuamente te invaden. Este es tu momento guau, así que no estás para nadie.Si no tienes bañera no te preocupes porque también puedes tener tu momento relajante en la ducha. Coge un buen guante de crin y date un masaje por todo el cuerpo. Utiliza el agua para masajear la piel de todo tu cuerpo. Lo importante en este paso es que seas consciente de lo que estás haciendo.

Cuídate y cuida tu cuerpo. Es necesario que les prestes atención, que te toques, te mimes, acaricies, que actives tu piel. A través de los transmisores cutáneos estás activando tus emociones. No consiste en que te des la crema de manera rápida y sin prestar atención. Hazlo de una forma en la que concentres toda tu atención y que lo hagas con cariño. Que sienta tu piel y sobre todo que sientas que te estás cuidando. Una mascarilla, arreglarte, depilarte, ponerte crema…como ves la variedad es amplia. Elige la opción que mejor te haga sentir y dedícate esos momentos a ti misma, sé consciente de que te estás regalando tiempo y te estás cuidando. ¡Empieza a mimarte! Así de fácil es conseguir relajarte y desconectar de todo. Es importante que cada poco tiempo realices estos rituales para que cargues las pilas. Empieza a incluir en tus rutinas diarias más momentos guau para que vayas alejándote del estrés.

¡Ser feliz sólo depende de ti!

Karina Rando