Actualmente, las constelaciones familiares se imparten de modo individual o grupalmente y se aplican a distintos ámbitos.

• Constelaciones de ámbito familiar: Son las constelaciones que tienen como objetivo principal la reorganización o reestructuración del sistema familiar.

• Constelaciones de ámbito personal: Son aquellas constelaciones que se practican como recurso para tratar únicamente el carácter de la persona, sin ahondar en temas familiares.

• Constelaciones de ámbito conyugal: Son las terapias consteladoras que se realizan cuando hay problemas de pareja.

• Constelaciones de ámbito profesional: Son las constelaciones que profundizan en temas de índole laboral (problemas con jefes y compañeros de trabajo).

• Constelaciones de ámbito empresarial: Son las constelaciones enfocadas a la resolución de conflictos internos de una organización tanto a nivel de plantilla como a nivel de actividad o trayectoria económica.

• Constelaciones de ámbito económico: Son las constelaciones llevadas a cabo como tratamiento para hacer frente a la falta, escasez o fugas económicas.

• Constelaciones del ámbito de la salud: Son las constelaciones que intervienen cuando hay problemas de salud física-mental, como enfermedades hereditarias en la familia o enfermedades adquiridas durante la gestación.

• Constelaciones kármicas: Son las constelaciones que se realizan cuando el origen del problema del paciente no se encuentra. Ante una fuente desconocida y que no se halla en un entorno familiar propiamente dicho, la terapia familiar se imparte para investigar y sanar vidas pasadas o energías antiguas.

(SÓLO PARA LA PERSONA CONSTELADA / LOS PARTICIPANTES NO SE TIENEN QUE PREPARAR) Es importante que investigues previamente acerca de situaciones significativas de tu familia como muertes prematuras, abusos sexuales, adicciones, estafas con herencias, suicidios, asesinatos civiles o militares y otros asuntos cruciales como abortos, secretos, exclusiones de familiares, etc. Toda información que puedas recopilar nos será muy útil en el momento de concretar el problema a constelar.

No todos los problemas se pueden constelar. Hay situaciones que la propia persona tiene que reorganizar ella misma en su mente y en sus emociones. Es el caso de todos aquellos problemas emocionales de actitud o de carácter. La constelación familiar, como método terapéutico, te muestra el cambio pero la responsabilidad de cambiar sólo la tienes tú. Ciertamente, la constelación puede darte un empujón para que te sientas más segura pero no te subirá la autoestima por el simple hecho de haber realizado una constelación. Por eso es importante que elijas bien tu problema: busca aquello que te causa sufrimiento continuado y que se repite una y otra vez en tu vida. La constelación se realiza cuando tus problemas responden afirmativamente a preguntas como por ejemplo:

• ¿Sientes que tu hijo no se comunica contigo lo suficiente?
• ¿Tu pareja está distante y no entiende realmente cómo eres?.
• ¿Tus padres están siempre controlándote y no valoran tus esfuerzos?.
• ¿Tu jefe menosprecia tu trabajo y tus compañeros intentan sabotear tu puesto laboral?
• ¿Tienes conflictos con tus hermanos para poder hablar y entenderte?
• ¿Intentas tener hijos por cualquier medio y el embarazo es imposible?
• ¿Sufres violencia doméstica en silencio?
• ¿Padeces una enfermedad grave que un familiar tuyo ha padecido anteriormente?
• ¿Has sufrido un accidente y no puedes olvidar el momento trágico?
• ¿Has perdido familiares y aún no has superado su muerte?
• ¿No tienes muy clara tu dedicación profesional?
• ¿Sientes deseos de suicidio y lo has intentado?
• ¿Tienes algún tipo de adicción?(drogas, alcohol…)?

Si te sientes identificada con alguna de ellas o crees estar pasando otra situación de suma importancia conflictiva, nosotros estamos abiertos a escucharte y a constelarte pero… Sólo tú decides tu sanación y te comprometes con ella.

La constelación familiar te permite liberar y desbloquear aspectos limitantes de tu vida. Te ofrece la oportunidad de despojarte de creencias, pensamientos y emociones que arrastras de tus ascendientes. Te sanas tú y se sanan los tuyos.

La constelación familiar te da solución a un problema concreto. Pero su completa sanación no es inminente. Con el paso de unos meses, tras la constelación, comienzas a ver los cambios en la situación constelada. A nivel personal, puedes sentirte más alegre y con más vitalidad y experimentar más momentos de serenidad y armonía. Cobrarás más fuerza y confianza, valorarás cada experiencia y cada momento con distensión y tranquilidad.

Tras una constelación, es importante que  durante 15 días no compartas la experiencia vivida en la terapia. En ese tiempo, debes convertirte nuevamente en el espectador de tu vida pero esta vez desde un espacio extra-terapéutico donde tu mayor misión es prestar atención a los cambios que te van sucediendo tanto interiormente como en tu entorno. Esos cambios te pueden parecer sorprendentes e  inexplicables pero no los cuestiones.  Evita forzar cualquier situación o actuar apresuradamente.  Siempre es mejor que todo fluya  tranquilamente y con normalidad.